(FNM) El Comandante de la Armada de Brasil, almirante Eduardo Bacellar Leal Ferreira, informó que el recorte de recursos debido a la crisis económica llevó a la institución a suspender el proyecto para monitorear el mar patrimonial y proteger los recursos del “presal”.
(FNM) El Comandante de la Armada de Brasil, almirante Eduardo Bacellar Leal Ferreira, informó que el recorte de recursos debido a la crisis económica llevó a la institución a suspender el proyecto para monitorear el mar patrimonial y proteger los recursos del “presal”.
Un estudio de la Universidad Estadual de Rio de Janeiro (UERJ) estima que el área del presal posee al menos 176.000 millones de barriles de recursos no descubiertos y recuperables de petróleo y gas natural.
Uno de los proyectos afectados es el del submarino nuclear, cuya previsión inicial de entrada en servicio, estimada para 2025, sufrirá un atraso de tres a cuatro años.
“Con un presupuesto 30% menor del previsto para este año, tuvimos que reformular el cronograma físico y financiero de una serie de proyectos. Todos los proyectos sufrieron reducción de ritmo en diferentes grados”, explicó Leal Ferreira a periodistas en San Pablo. “Tenemos que enfrentar esta realidad y hacer nuestra contribución para adaptarnos a la situación de crisis económica. No podemos desistir ni desesperarnos”, agregó
En mayo, el gobierno federal bloqueó R$ 69.900 en gastos para 2015. Según la Ley de Presupuesto, la Armada dispondría este año de R$ 3.850 millones para funcionamiento y R$ 2.100 millones para inversiones. Con el recorte, la cifra de inversiones se redujo a R$ 1.300 millones.
El proyecto para controlar y vigilar la Zona Económica Exclusiva brasilera, denominado Sistema de Gerenciamiento de la Amazônia Azul (Sisgaaz), un área de 4,5 millones de km2, tiene una inversión estimada de R$ 13.000 millones y estaba inicialmente prevista su conclusión para 2027.
La interrupción se produjo el 29 de octubre “debido a las restricciones presupuestarias impuestas”. En esa fecha se enviaron comunicaciones oficiales a tres consorcios que compiten por constituirse en contratista principal.
Según lo informado por la Armada, el alerta – cuyo texto no fue divulgado- fue enviado a Embraer Defesa & Segurança, Odebrecht Defesa e Tecnologia y Orbital Engenharia. No hay previsiones en cuanto a la fecha en que será retomado el programa, lo que ocurrirá “cuando las condiciones financieras lo permitan”.
A semejanza del proyecto del Ejército para vigilar las fronteras terrestres, el Sisgaaz tiene por misión garantizar la defensa y una mayor seguridad marítima en el Atlántico Sur, generando mayor eficiencia de los órganos brasileros para la fiscalización del narcotráfico y contrabando por vía marítima, las operaciones de búsqueda y salvamento y también impedir que embarcaciones de otros países violen las aguas jurisdiccionales brasileras.
El 30 de octubre, el diario “Folha de S. Paulo” informó que buques de guerra de los EEUU habían realizado operaciones marítimas en el litoral brasilero en 2014, sin avisar a las autoridades y sin haber sido detectadas. Según el almirante Leal Ferreira, lo ocurrido se debe a una diferencia de interpretaciones entre Brasil y los EEUU respecto a ciertas cláusulas de la Convención de las Naciones Unidas sobre Derecho del Mar. El jefe brasilero minimizó las sospechas de que puedan haberse producido otras situaciones similares,
“Yo considero que es nuestro derecho autorizar maniobras militares, en especial con empleo de armas, en nuestra Zona Económica Exclusiva. Los estadounidenses tienen una posición diferente; ellos entienden que la navegación allí es libre y que no incluye restricciones a las operaciones militares. Es la interpretación que ellos tienen e intentan forzar la idea de que actúan coherentemente con ese punto de vista”.
“Se trata de un asunto para discutir en el ámbito diplomático y no en el militar”, agregó. “Son pequeños puntos de divergencia que no podemos transformar en grandes contiendas”.
El comandante naval explicó que una vez implementado, el Sisgaaz permitirá a Brasil identificar los buques que ingresen en toda su área de control. Con la suspensión del programa, no se sabe cuándo ocurrirá.
Submarinos
La construcción del submarino nuclear, que también servirá como factor de disuasión y para imponer el poder militar brasilero en el mar, también fue afectada por el recorte de recursos.
Además de un atraso de hasta cuatro años para la finalización, se producirá una reducción de 200 empleados civiles en São Paulo e Iperó, entre fines de 2015 y comienzos de 2016. Actualmente trabajan 3.000 personas en el desarrollo, de las cuales 1.200 son profesionales calificados que no pueden ser desvinculados del programa, ya que poseen información de carácter estratégico.
El proyecto del submarino nuclear brasilero se inició en 1979 y ya consumió recursos por más de R$1.000 millones. “Fuimos afectados por el recorte presupuestario y tuvimos que bajar el ritmo, pero no se paralizó. En 2015 esperábamos R$ 320 millones para el funcionamiento del proyecto y recibimos R$ 250 millones. Es una reducción significativa que habrá de mantenerse durante 2016”, afirmó Leal Ferreira.
La Armada también se ha visto trabada por adversidades para desarrollar la propulsión nuclear, dado que los países que poseen el conocimiento – el selecto grupo con asiento permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU (EEUU, Rusia, China, Reino Unido y Francia)-, no desean transferirlo a Brasil.
“Seguramente, se va a atrasar. Existen dos dificultades. La primera es financiera. Deberíamos tener un flujo de dinero constante porque hacemos contratos a tres y cuatro años y reformular un contrato de esos resulta siempre muy difícil. La segunda dificultad es técnica, porque estamos desarrollando todo nosotros solos. Pero estamos avanzando”, afirmó el jefe naval.
“Cuando aquellos países toman conocimiento de que vamos a utilizar un determinado equipamiento en el programa nuclear, prohíben su venta. Todo lo tenemos que desarrollar nosotros mismos. A pesar de las dificultades técnicas, estamos avanzando y, hasta ahora, no tuvimos impedimentos que no pudiéramos sortear” (O Globo en Portos e navios. Adaptado al español por NUESTROMAR
15/11/15