La empresa estadounidense informó que las ballenas que están en su acuario se convertirán en la última generación de orcas que se criarán en el parque, varias veces cuestionado por su trato a esos animales.
La empresa estadounidense informó que las ballenas que están en su acuario se convertirán en la última generación de orcas que se criarán en el parque, varias veces cuestionado por su trato a esos animales.
“Últimas noticias: las orcas actualmente bajo nuestro cuidado será la última generación de orcas en SeaWorld”. Con ese tuit, la empresa de entretenimientos que ha levantado más de una polémica por su trato hacia los animales que mantienen en cautiverio en sus parques, anunció la medida más importante que “muestra una nueva dirección de la compañía”.
“¿Por qué la gran noticia? -señalan en su sitio- SeaWorld ha estado escuchando y estamos cambiando. La sociedad está cambiando y estamos cambiando con ella. SeaWorld está encontrando nuevas maneras para seguir cumpliendo con nuestro propósito de inspirar a todos nuestros clientes a tomar medidas para proteger a los animales salvajes y los lugares salvajes”.
“Este anuncio reafirma nuestro compromiso de no recoger a los mamíferos marinos de la vida silvestre. Después de todo, no hemos recogido una orca de la vida silvestre en casi 40 años, y las orcas en SeaWorld o nacieron o han pasado casi toda su vida bajo el cuidado humano”, dice el texto, en el que subrayan que “estas majestuosas orcas no serán liberadas en el océano, ni confinados en jaulas marinas”.
“No podrían sobrevivir en los océanos para competir por comida, estar expuestos a enfermedades desconocidas o tener que lidiar con preocupaciones ambientales – incluyendo la contaminación y otras amenazas producidas por el hombre”, explican. “En cambio, [las orcas] tendrán vidas más largas y saludables bajo el amor y el cuidado de nuestros dedicados veterinarios y otros especialistas entrenados, donde ellas pueden inspirar a esta y futuras generaciones a ser conservacionistas a partir de presentaciones naturales que son divertidas, emocionantes y que van a educar a los invitados sobre la difícil situación de las orcas en la vida silvestre”.
En ese sentido, SeaWorld añade que el fin de su controvertido programa de crianza de ballenas es sólo uno de los cambios “históricos” de la compañía, que también incluye reemplazar los “espectáculos teatrales” con esos animales por “encuentros educacionales”. La empresa anunció también una colaboración con la asociación protectora de animales Humane Society.
El CEO de SeaWorld, Joel Manby, escribió un artículo en el diario Los Angeles Times en el que vuelve a exponer esos argumentos y da cuenta de la “paradoja” de la empresa que, según él, gracias a la exposición de las orcas en su parque la gente ahora se preocupa por ellas y pide por su liberación.
Ataques y polémica
La empresa ha sido cuestionada varias veces por el trato que le brindan a los animales acuáticos que mantienen en cautiverio y también por las muertes de tres personas atacadas por la ballena asesina Tilikum, incluida una entrenadora en 2010.
La misma orca estuvo implicada en otra muerte, en 1999, y también habría causado la muerte de otro de sus entrenadores, en 1991, en el centro Sealand of the Pacífic, en Canadá, antes de ser llevada al SeaWorld de Orlando. Según la cadena CNN, Tilikum estaría muriendo.
En noviembre de 2006 el entrenador Kenneth Peters, de 39 años, sufrió una mordedura cuando una orca de 3,17 toneladas lo retuvo bajo el agua durante un espectáculo en el parque acuático que se encuentra en San Diego, California. Peters logró escapar de la orca, pero con una fractura en un pie. (La Nación)
18/03/16