El sábado Astillero Contessi botará el “Franco José”, un costero que operará sobre langostino desde el puerto de Rawson. La Cámara de la Industria Naval se reunió con autoridades gubernamentales. Incentivos para recambio de flota pesquera por barcos nacionales.
El sábado Astillero Contessi botará el “Franco José”, un costero que operará sobre langostino desde el puerto de Rawson. La Cámara de la Industria Naval se reunió con autoridades gubernamentales. Incentivos para recambio de flota pesquera por barcos nacionales.
Este sábado a las 11 Astillero Contessi anunció la botadura de un nuevo barco pesquero construido en las gradas de la empresa marplatense. Será el “Franco José”, de la empresa Pesquera Gianfranco, que conduce Franco Vestuti.
El costero de casi 21 metros de eslora, 6,60 metros de manga moldeada, responde al prototipo 19AC/TM-FV, comenzó a ser construido en septiembre del año pasado, casi en simultáneo con la botadura doble del “Misal” y “Sagrario”, que también navegaron aguas al sur para operar desde la Patagonia.
Se esperan autoridades pesqueras y portuarias así como legisladores provinciales y representantes municipales en la tradicional ceremonia al pie de del varadero, que en esta oportunidad tendrá pocos espacios disponibles ya que las gradas están ocupadas con un par de buques en reparaciones.
Obreros navales le dan los últimos retoques al flamante barco, que tendrá un puntal moldeado de 3,18 metros, calará 2,70 metros y será propulsado por un motor Mitsubishi.
Se trata de una embarcación versátil, apta para realizar pesca de arrastre y media agua aunque estará enfocado principalmente a la pesca del langostino, pesquería que ha posibilitado las órdenes de trabajo en el astillero.
Con la idea de incrementar el nivel de actividad en toda la industria naval de Mar del Plata, directivos de la Cámara de la Industria Naval se reunieron la semana pasada con el subsecretario de Pesca, Tomás Gerpe; y con el subsecretario de Industria, Fernando Grasso.
En encuentros separados, los representantes de astilleros y talleres navales de la ciudad realizaron un resumen del estado actual de la flota pesquera nacional, la necesidad de reemplazar buques que ya han cumplido largamente su vida útil y expusieron la mecánica seguida en los últimos años, que permitió a las empresas importar buques usados del extranjero.
Los dirigentes presentaron a las autoridades un documento en el que reseñaron la situación del sector. Debido a esta posibilidad de importación y a la falta de créditos específicos, quienes sobrevivieron debieron conformarse con financiar con fondos propios las construcciones y limitarse a atender a la flota costera.
Gerpe y Grasso escucharon de boca de los industriales marplatenses que la industria naval nacional está en condiciones de construir no solo barcos costeros. El sector asegura no estar planteando privilegios ni trabas, sino por el contrario que los armadores nacionales tengan beneficios reales para construir en el país y que haya sentido común para redistribuir la renta pesquera entre la mayor cantidad de argentinos.
Para que exista un desarrollo definitivo de la industria naval se necesitan dar varios pasos casi a la vez. Una política de Estado, líneas de financiamiento específicas, una Ley de Marina Mercante e Industria Naval que incluya al sector pesquero, modificar la Ley de Hipoteca Naval, protección contra la competencia desleal y la importación o charteo de artefactos usados.
Hasta ahora esos objetivos de largo plazo siguen pendientes y cuando fueron planteados no fueron atendidos en la última década. Lo que se plantea ahora es que mientras se sigue trabajando en esas asignaturas pendientes se aplique desde la Subsecretaría de Pesca o el CFP una política de incentivos a la construcción nacional y desaliento de la importación de barcos pesqueros del extranjero. (Por Roberto Garrone; Revista Puerto)
29/04/16