(FNM) Fue el resultado electoral más temido por el transporte marítimo: la victoria del Partido Liberal Demócrata de Japón y el regreso de Shinzo Abe al cargo de primer ministro.
(FNM) Fue el resultado electoral más temido por el transporte marítimo: la victoria del Partido Liberal Demócrata de Japón y el regreso de Shinzo Abe al cargo de primer ministro.El retorno de la derecha dará paso a una nueva política energética en Japón, que muy probablemente resultará desfavorable para el sector naviero, en particular para el segmento de transporte de Gas Natural Licuado (GNL).
La expectativa entre los observadores es que el nuevo gobierno revertirá la decisión del derrotado Partido Demócrata de Japón, de eliminar la energía nuclear para el año 2040. El partido recién instalado es favorable al desarrollo nuclear.
La decisión de retener las fuentes de energía nuclear echará un balde de agua fría sobre las esperanzas de un crecimiento impactante en el transporte marítimo de GNL hacia el Japón.
El transporte de gas natural licuado experimentó un extraordinario crecimiento después del cierre de los reactores nucleares japoneses, como consecuencia del desastre de Fukushima.
Puesto en perspectiva, en lo que va del año Japón ha tomado casi el 40% del GNL del mundo para mantener sus luces encendidas. Para el sector naviero, esto implica más de 100 cargamentos extra transportados a Japón, respecto del 2010.
Y no ha sido solamente el gran volumen importado por Japón la causa de la expansión del transporte de GNL. Igualmente significativo es el hecho de que las cargas provienen de las lejanas áreas de la cuenca Atlántica y de Qatar, lo que resulta en viajes más largos que mantienen ocupados a los barcos y refuerzan el mercado.
La vuelta a la energía nuclear significará menos de esos viajes en operaciones spot y contratos de corto plazo, lo que interrumpirá el desarrollo vital que ayudó al progreso del transporte marítimo de GNL.
El nuevo gobierno quiere tomarse un plazo de tres años para decidir cuáles de los alrededor de 50 reactores japoneses son suficientemente seguros para retornar al servicio.
Para el sector del transporte marítimo de GNL los tres próximos años serán, por tanto, cruciales.
Por Hal Brown – Loyds List (18/12/12)
20/12/12
FUNDACIÓN NUESTROMAR