Trabajadores y representantes del empresariado productivo nacional marcharán el 21 de agosto desde la esquina de Av. 9 de Julio y Belgrano (Ciudad Autónoma de Buenos Aires), a las 9 de la mañana, al Congreso de la Nación, “para entregar en mano a los legisladores nacionales un documento donde ratificamos y reivindicamos la necesidad soberana para nuestra Patria de tener éste año una ley industria naval y una flota de bandera propia”.
Trabajadores y representantes del empresariado productivo nacional marcharán el 21 de agosto desde la esquina de Av. 9 de Julio y Belgrano (Ciudad Autónoma de Buenos Aires), a las 9 de la mañana, al Congreso de la Nación, “para entregar en mano a los legisladores nacionales un documento donde ratificamos y reivindicamos la necesidad soberana para nuestra Patria de tener éste año una ley industria naval y una flota de bandera propia”.
En un comunicado, la Asociación Bonaerense de la Industria Naval anunció:
“En este sentido, con un Estado actuante y protagonista (y no un mero espectador), van directamente las propuestas originadas desde la Subsecretaria de Puertos y Vías Navegables – Ministerio del Interior y Transporte – Gobierno Nacional desde mediados del 2012 hasta la fecha, tales como:
Proyecto de Decreto – creación de Empresa Nacional de Dragado; Proyecto de Órgano de Control de Concesiones de Dragado, Balizamiento y Señalización; creación de Consejos Consultivos (Portuario; Vías Navegables; Transporte Fluvial, Marítimo y de la Industria Naval; Amarraderos y Espejos de Agua); Formulación de Programa Logística por Agua; Programa de Reparaciones de las Dragas y Embarcaciones de propiedad del Estado Nacional; etc.
Pero además de ellas, vale destacar aquí otras cuatro medidas puntuales relacionadas:
– Disp. 1108/2013 (promoción de cargas y actividades logísticas agregadas en puertos argentinos);
– Disp. PNA 01/13-REPOL 008 (aumento de la seguridad en la navegación y, a la vez, reactivación de la navegación de cabotaje para remolcadores argentinos);
– Res. 600/2014 (considerada como la medida estratégica marítima más trascendente de los últimos cien años en la Argentina, establece la traza de un nuevo canal que será el acceso desde el Océano Atlántico a la totalidad de los puertos fluviales argentinos para que la mayor parte de los buques puedan salir desde nuestros puertos a plena carga con productos de origen nacional, evitando así completar carga en puertos extranjeros e ingresar, también, a plena carga, con insumos y productos de importación, en buques de mayor tamaño que los actuales);
– Proyecto de Ley de Promoción de la Marina Mercante Nacional y la Industria Naval Argentina (Exp. administrativo Nº S02:0019123/12 del 19/10/2012 y Expte. Nº 7288-D-2013 del 4/11/2013 – Cámara de Diputados de la Nación, cuyos objetivos son el crecimiento sustentable de la flota mercante y la industria naval argentina; la consolidación del cabotaje nacional y tráficos bilaterales y multilaterales a fin de retomar en forma paulatina la presencia de la marina mercante nacional en los tráficos internacionales; la generación de nuevas fuentes de trabajo, favoreciendo la formación de trabajadores nacionales, asegurando el empleo de las tripulaciones argentinas y personal de la industria naval y de actividades conexas; el acceso a líneas de prefinanciación y financiación para los armadores nacionales que construyan de buques y artefactos navales en el país);
Estas normas implican que Argentina y los argentinos contemos con herramientas y políticas públicas dirigidas al desarrollo del sector portuario, de las vías navegables, de la flota de bandera y de la industria naval; significan tener y ejecutar una actitud soberana que, además, resulta claves para que Argentina recupere su protagonismo en el tráfico marítimo y fluvial, para que sus puertos vuelvan a tener una activa operatoria y cargas constantes, y para que la industria naval ocupe el rol preponderante que le corresponde en el desarrollo productivo nacional.
Se trata de acciones directamente dirigidas hacia la industrialización con inclusión social, el fortalecimiento de la competitividad de la economía argentina, el aumento del valor agregado propio, la creación de más empleos para los argentinos, y la presencia real, positiva y eficaz de una flota, con puertos y astilleros que resguarden la participación económica nacional.
En Argentina, el octavo país en extensión territorial del mundo, todos aquellos que hemos vivido o vivimos en pueblos ubicados en el litoral marítimo o fluvial de la Patria sabemos muy bien de qué hablamos y todo lo que implica recuperar efectivamente nuestro complejo marítimo-fluvial, con su sistema integral de logística, flota, vías navegables, puertos e industria naval.” Fuente: Asociación Bonaerense de la Industria Naval (Webpicking)
18/08/14